Sin señalar a nadie, el padre de Amy Winehouse ha dicho que los ladrones deben estar entre la veintena de personas que acudieron a casa de la cantante una vez muerta. Entre ellos, personal de seguridad, policía, amigos y familiares. Alguien, con visión de negocio futuro, habría asaltado la casa, llevándose consigo algunas guitarras, letras de canciones inéditas e incluso objetos tan personales como cartas dirigidas a la diva inglesa.
Aunque Mitch Winehouse ha declarado estar completamente desolado por el asalto, el padre de Amy, que no obstante regalaba hace unos días algunas joyas y vestidos de su hija a los fans, no quiere emprender acciones legales. Por eso, ha pedido a los ladrones que devuelvan los objetos sustraidos de manera anónima. Así, dice, todos los implicados salen ganando. Sin embargo, y dado los altos ingresos que podrían obtener con su venta, parece poco probable que vayan a ser devueltos en breve.
Y es que todo lo relacionado con Amy Winehouse se ha revalorizado tras encontrar muerta a la cantante. Desde sus canciones inéditas, que formarán parte de un disco póstumo, hasta la colección de ropa que preparaba y que, previsiblemente será puesta a la venta en brevre. Incluso, la policía de Londres ha llegado a denunciar que los fans han robado todas las placas cercanas a la casa de la diva.